martes, 10 de mayo de 2016

Mi primera vez????

Relato finalista en el Concurso de Relatos Eróticos “AFRODITA Y EROS” 2016
Convocado por Letras con Arte y publicado en la Antología Afrodita y Eros

Su madre nos trajo un zumo y unas pastas:
-¡Chicos, ya está bien de tanto estudiar, a merendar! Salgo a comprar un momento.
No me lo podía creer ¡Solos! La merienda dio lugar a risas y juegos tontos; como cuando le cayeron unas migas en el escote y yo, sin pensarlo se las quite. De pronto me detuve, colorado y sin palabras.
-¡Lo siento, ha sido sin pensar!
Sin apenas terminar la frase; Sandra, puso de nuevo mis manos sobre su pecho, pero esta vez apartando su blusa.
¡Creí morir de placer, esto solo pasaba en sueños! Así que me deje llevar; palpe sus pechos suaves, redonditos, perfectos para mis manos; estos comenzaron a endurecerse y el pezón parecía un botón de una camisa a punto de explotar (igual que yo); sin poder contenerme puse mi boca sobre unos de ellos, como un bebe hambriento, exactamente, un bebe hambriento que hacía 17 años que esperaba su comida; restregaba mi lengua sobre ellos, deteniéndome en los pezones, saboreando cada uno de ellos; incluso podía oír el latir acelerado de su corazón.
Sandra, seguía cada uno de mis lametones con ansiedad; inesperadamente puso mi mano sobre su sexo. ¡Dios, como me estremecí, aquello era demasiado! Era caliente, sin quemar; era suave, sin resbalar; era húmedo, sin empapar; su aroma impregnaba, sin molestar.
Ante mi torpeza, Sandra comenzó a guiar mis manos, mientras ella suavemente gemía y movía sus caderas.
Una de sus manos se poso de forma brusca e intempestiva sobre mi bragueta y agarro fuertemente con sus manos…
-¡Ahhhhhhhh! Alcance a decir, no podía creerlo, esto solo podía pasar en mis peores pesadillas.
Sandra, ofendida, no daba crédito a lo sucedido.
-¿No me digas que te has corrido?
-Yo, yo, yo… ¡Lo siento! Nunca antes…
-¡Sandra, ya volví! ¿Qué tal, ya terminaron los estudios?
En apenas 2 minutos todo estaba como antes, todo en su sitio; la blusa, su falda, los libros…
-Sandra corazón ¿qué te pasa, pareces agotada? Y tú Juan estas todo rojo, la cabeza debe de arderos de tanto estudiar.
-¡Tranquila mamá, que ya aprendimos suficiente por hoy, no creo que haga falta que volvamos a quedar!
-¡Uhyyyyy que chica más lista tengo! No deja de estudiar, ayer con Luis, hoy contigo y así sin parar.
-¡Sí, sí bueno, adiós señora! Alcancé a murmurar mientras intentaba tapar con los libros la mancha delatadora de mi pantalón.

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