Siempre creí que si era
coherente con mis pensamientos y actuaba conforme a ellos me sentiría bien.
¿Cual es mi sorpresa al
descubrir que algunas veces no sucede así?
“Haz como dices y sigue tú
camino”
Muchas veces es liberador
y te llena de felicidad, sin embargo otras parece que te deja un nudo en la
garganta que te ahoga, que te oprime y disgusta.
Sigues preguntándote:
¿Podía haber reaccionado,
hablado, actuado de otra manera para no hacer daño o para no ofender?
Seguramente la respuesta será
que SI, pero no por ello estabas equivocad@.
Realmente actuar conforme
nuestros principios, puede hacernos sentir mal de forma momentánea; sin embargo
no es un daño real, es un dolor hacia las personas que tal vez resultan heridas
por nuestros principios. Luego; actuando de forma distinta, seguro que este
dolor no se hubiese evitado; es más, repercutiría a la larga en nosotr@s, en nuestra
vida, en nuestros actos y principios.
Así pues, ante un
problema, no ocurre nada si sentimos dolor, derrota, pena, miedo, incertidumbre…
No nacimos enseñad@s, no
nacimos con el camino aprendido; venimos a aprender a crecer, a trabajar cada día
nuestras fortalezas y debilidades.
Y tal vez ese es el propósito
de la vida:
Aprender a ser honest@s con
compasión y perdón.
Autora:Rosa Francés Cardona (Izha)
Acupuntora, MTC, hipnosis, Dietética y Nutrición.
Redactora en: http://www.enbuenasmanos.com/
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario