sábado, 30 de noviembre de 2013

Sin forzar





A veces nos damos de narices intentando cambiar a los demás.
Tal vez su tiempo no ha llegado.
Tal vez tienen que romperse sus alas antes de alzar el vuelo, aunque veas que se las rompen una y otra vez.
Cada cual necesita sus propias alas para volar, para ser libres; no valen tus alas para la otra persona, por mucho que la ames, por mucho que no quieras que sufra, que le hagan daño, que pase malos momentos...
Cada persona necesita sus propias lecciones, vivencias, alegrías, amarguras...
No valen las tuyas, las tuyas solo te valen a ti.

Autora: Rosa Francés Cardona (Izha)
http://herboristeriaherbasana.es/

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