sábado, 15 de junio de 2019

Charlas de cuadrilla 1


Hoy comemos todos juntos, pues Andrés se jubila y hay que celebrarlo.
Al lado hay una reserva de 10 personas que acuden de forma pausada. Primero llegan la pareja más joven; luego acuden 3 hombres y todos se piden algo para hacer tiempo; después llegan las 3 mamás con sus bebés y para finalizar corriendo llega la última pareja con una nena de unos 5 años y un bebé.
Mientras nosotros reímos y celebramos la jubilación regando el momento con un buen vino, al que yo “asesino” con gaseosa, no hay otra forma de que yo pueda tomarlo.
La mesa vecina se acomoda: niños llorando, hombres discutiendo de fútbol,,,
Nada relevante, parece al menos a simple oído.
Al final no puedo evitar meterme donde no me llaman (para variar) y observo en voz alta:
-¡Tantos años de diferencia y tan pocos cambios! Tanto oír que la igualdad, que ahora el hombre esta discriminado, que la mujer está mejor que nunca, que… y solo hay que mirar la mesa vecina para ver que en 30 años de diferencia apenas hay cambios,
Todo el grupo mira con atención la mesa vecina, sin encontrar ninguna cosa “rara”.
- ¿A qué te refieres? No veo ninguna mujer sufriendo.
Suelta atropelladamente Andrés. Mientras todos miran la mesa y de nuevo me miran de forma interrogatoria, sin entender ni ver nada “fuera de lo común”.
-¡Ya está la feminista! ¿A ver ahora por dónde nos sales?
Digna “prenda” “soltada” por Xavi, no podía salir de otra boca.
De paso el resto me mira también sin entender que hay de malo en la mesa vecina.
-¿De verdad no veis nada raro?

-Son 10 personas, 4 bebés y una nena. A un lado de la mesa hay 5 hombres y solo una mujer entre ellos, al otro lado de la mesa hay 5 mujeres con sus respectivos hijos. Solo hay una mujer entre los hombres, hablando y riendo con ellos a carcajada limpia; el bebé de ella una vez le ha dado el pecho a sido el papá el que ha salido cuando lloraba. El resto de mujeres está comiendo y dando de comer a sus hijos a la vez, sacándoles fuera cuando lloran… y sus respectivos ni se han enterado, ellas apenas disfrutan de la comida, solo están para sus hijos y hablan de: la guardería, la ropa, lo que comen y de que están malitos.
¡je, je, soy así de maruja!
-¿Y… no querrás tú qué sean ellos los que los saquen y lo hagan todo…?  Que están de comida.
Preciosa perla de mi “respectivo” que no es para nada machista (siempre según él, claro).
De momento el silencio en mi mesa se ha logrado, nadie acaba de entender mi discurso, siquiera las féminas de mi mesa, a todos les parece una situación normal.
-A ver, 10 adultos: 5 mujeres, 5 hombres; cada sexo se sienta en un lado, excepto una mujer que está mezclada entre los hombres; ella es la única fémina que excepto por dar el pecho que no puede hacerlo el padre, está disfrutando de la comida, junto a su bebé, pues se turnan ambos en tenerle al brazo y calmarle; 4 mujeres están comiendo, dando de comer, cuidando, calmando, durmiendo… a sus hijos; 4 hombres están disfrutando de una comida, bebiendo, riendo… sin importarles un pepino el resto. Es decir solo un 20 % tiene una actitud igualitaria ante una misma situación.
¡Bueno…! A partir de esta frase ya no prestamos más atención a la mesa vecina, pues iniciamos una acalorada mini-discusión sobre lo egoístas que éramos algunas mujeres (según ellos) y sobre lo poco que hemos avanzado (según yo) cosa en la que curiosamente también estamos de acuerdo un porcentaje del 20% al finalizar la controversia.

Acupuntora, MTC, hipnosis, Dietética y Nutrición.

miércoles, 12 de junio de 2019

Respeta sin juzgar


Cada persona tiene tras de si una historia 
No juzgues 
Respeta
Cada mujer sabe de su renuncia 
Huye de prejuicios 
Huye de estereotipos 
No juzgues 
Respeta
Cada mujer sabe de su dolor 
Es un error juzgar a nadie desde nuestra posibilidad, posición y vida.
Cada mujer sabe cuántas lágrimas ha vertido en su camino para poder llegar a donde esta 
No juzgues 
Respeta 
Y si entra en conflicto con tu sentir
Abrázala, abrázala 
Fúndete en su sentir
Vibra en sintonía
Aunque solo sean unos segundos 
Y si sigues sin entender 
Tranquil@
Solo aléjate con amor 

Acupuntora, MTC, hipnosis, Dietética y Nutrición.

viernes, 7 de junio de 2019

¿Qué encontrarás en un retiro de silencio?


-¿Un retiro de silencio?
-Pero... ¿Podremos hablar?
-Qué aburrido ¿no?
-¿Qué, vamos a estar todo el rato callad@?
-Que rarit@s sois ¿no?
¡Ja, ja, ja...!
Estas y otras perlas son las que he estado escuchando últimamente.
Te digo solo mi opinión, que desde luego no es la de una experta en silencio, ni nada similar.
No, no vamos a hablar, para algo se llama retiro de silencio.
¿Aburrido? No sé, tal vez; la idea es aprender a estar conmigo mism@ y aunque no lo creas a veces es un ardua tarea.
Además no vamos a estar sin hacer nada, a nuestra mente charlatana le encanta estar merodeando por esos sitios de inactividad aparente y comenzar a picotear sin parar.
Vamos a centrar nuestra atención (que es lo contrario de lo que a nuestra dispersa charlatana le gusta) en nuestra respiración, en las sensaciones... para aprender a descubrir e identificar a la mente que vibra con la unicidad, dejando a un lado a la mente dual. Todo ello realizado desde la única manera posible: el amor, la compasión y sin juzgar.
Así que parece que aburrido no será, aunque nuestra mente dual intentará sabotearnos a toda costa de mil maneras:
-¡Uff, me pica la nariz! me rasco y...Ahora me pica el codo...
-Ya no se cómo sentarme.
-¿Y si alguien me llama?
-¿Qué estarán haciendo en casa?
-¿Me habrán grabado el programa?
-Etc
Entonces haciendo de detectives, descubriremos a la mente saboteadora y sin juzgarla, la apartaremos a un lado amorosamente; repitiéndolo las veces que lo necesitemos.
¡Bueno! Esto es lo que yo espero encontrar en un retiro de silencio.
¿Y tú?

Acupuntora, MTC, hipnosis, Dietética y Nutrición.

miércoles, 5 de junio de 2019

Mi danza tribal


¡Pom; pompom; pom!
Mientras sueño, resuena mi cabeza
El sonido de una danza tribal

Los tambores
Los cuerpos agitándose son de la música


Soy yo
Eres tú
Es ella 
Somos nosotras
Somos sus hijas
Somos guerreras, somos hechiceros, somos poderosas 


Mi mujer salvaje se sacude, al ritmo del tambor 

Mi loba aúlla, permitiendo resurgir mi ser ancestral
Mi pelo flota, al viento soltando viejos estereotipos 
Mi sagrado despierta, del fuego ancestral 


¡Pom; pompom; pom!
N
o quiero despertar 
No quiero olvidar de nuevo que soy hija de la tierra y de la creación 
Que en mí habita la belleza de las estrellas y la fortaleza del volcán 
¡Pom; pompom; pom!
Es hora de regresar
Acupuntora, MTC, hipnosis, Dietética y Nutrición.

El payaso


Obra presentada en Letras con Arte para el concurso HISTORIAS DE SUSPENSE O TERROR IV y cuyo fallo ha sido notificado el20 DE MAYO de 2019, resultando finalista y por ello publicada en el libro  antología “HISTORIAS DE SUSPENSE O TERROR IV 2019”
El payaso
Un día más de parque, niños corriendo, gritos, risas, arena… La verdad es que siempre le había agobiado esa parte del día ¡pero Inés se divertía tanto… ! 
Además llegaba agotada a casa y le daba un respiro, era llegar a casa después del parque, ducharla, darle la cena, después la acostaba y… era su tiempo: de tirarse en el sofá, de tener de fondo el sonido de la TV en algún programa que ni prestaba atención, solo allí con la mente vacía, descansando ¡al fin!
Aburrida de tanto mirar cómo se rebozaba en arena, la distrajo el teléfono con un mensaje, luego su atención se quedo allí, mirando mensajes y contestando tonterías. Cuando de pronto se acordó de la niña; miró, miró y… la angustia comenzó a apoderarse de ella, no estaba ¿dónde está? ¿Qué ha pasado? ¡Si ella no se mueve nunca, si no habla con extraños!  A velocidad de vértigo miles de pensamientos la ahogaban, mientras corría de un lado a otro, buscando sin parar, llamándola a gritos, preguntando, llorando…
Todos la miraban, unos sin comprender, otros se pusieron a buscar con ella, alguien llamo a la policía; cuando llegó ella ya había entrado en pánico y no cesaba de llorar.
La policía llamó al padre y este se abrazo a ella; no necesito preguntar nada, la policía le puso al día aunque tampoco podía procesar lo que le decían.
-“Ella no habla con extraños, es algo que sabe que no debe de hacer y menos se iría con nadie. ¿Qué le ha pasado, dónde está?”
-“Tranquilo por suerte en esta zona hay varios bancos, tal vez las cámaras nos proporcionen más información ¿sabe si ha podido llevársela algún familiar o irse con algún amiguito?”
Pronto supimos que nadie sabía nada e Inés era parte de un caso de niños desaparecidos; muchos, tal vez demasiados en un pequeño periodo de tiempo.
En nuestra locura, nadie supo aportar nada nuevo, hasta que las imágenes de los bancos fueron cotejadas.
Los niños jugaban y de pronto apareció Ronald el famoso payaso y varios niños se acercaron a él, entre ellos Inés, aunque a ella le cogió la mano ¿Cómo desconfiar de él?
Meses después aparecerían los cadáveres de los niños semienterrados en una casa de campo; nunca se supo del asesino, murieron a manos de alguien en quien confiaban, que abuso de ellos sexualmente y dejo mutiladas a sus familias.
Acupuntora, MTC, hipnosis, Dietética y Nutrición.

¿ CAES EN EL VICTIMISMO ?